Los grupos armados de las localidades libias de Sabrata y Zauiya, enfrentados desde hace semanas en el noroeste del país, rico en petróleo, han alcanzado un alto el fuego tras las violentas escaramuzas que dejaron al menos dos fallecidos el pasado viernes.
El alcalde de Sabrata, Mohamed al Hasluk, ha explicado que los notables de ambas localidades se han comprometido a evitar tales actos de violencia en un futuro, según declaraciones recogidas por el portal ‘The Libya Observer’.
Según fuentes locales, los enfrentamientos del viernes comenzaron cuando milicias de Zauiya protagonizaron una incursión para detener a un alto responsable de los grupos armados de Sabrata, identificado como Ahmed Danbashi.
Aunque los enfrentamientos no terminaron de estallar del todo, algunas familias acabaron abandonando la zona por seguridad, de acuerdo con el portal libio, con la ayuda de la Media Luna Roja.
La actividad de las numerosas milicias que operan en Libia –y particularmente en el noroeste, donde se encuentran muchos yacimientos de crudo– se ha multiplicado desde el mes de marzo.
Ese mes, el país volvió a entrar oficiosamente en un estado de bicefalia administrativa con la declaración de Fazi Bashaga como «primer ministro» por el Parlamento del este del país, frente su gran rival, el jefe del Gobierno de unidad, con sede en Trípoli, Abdul Hamid Dbeibé, a quien considera un mandatario deslegitimado.
El Gobierno de transición libio tenía el mandato de llevar al país a elecciones en diciembre pasado, pero nunca se llevaron a cabo debido a las divisiones sobre las reglas y la presencia de candidatos controvertidos, hasta culminar en el polémico nombramiento de Bashaga.
Fuente: (EUROPA PRESS)