El secretario de Gobernación de México, Adán Augusto López Hernández, ha confirmado la existencia de una «investigación internacional» en contra del expresidente mexicano Felipe Calderón por presunto tráfico de armas.
Según ha detallado López Hernández, la investigación está relacionada con la operación ‘Rápido y Furioso’ mediante la cual Estados Unidos, a través de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), introdujo de manera deliberada unas 2.500 armas de fuego con el objetivo de identificar y detener a compradores y distribuidores.
El representante mexicano ha acusado al expresidente Calderón y su equipo más cercano de haber «bañado de sangre al país» y haber terminado su mandato convertido en «traficante de armas», según recoge el diario mexicano ‘La Jornada’.
«Cuando hablamos de compra de armamento, todo mundo recuerda cómo en la época de Calderón, no sólo se militarizó al país sino que, en el colmo de la desvergüenza, él y su gobierno terminaron convertidos en traficantes de armas», ha aseverado.
López Hernández ha recordado que durante aquella época el armamento que debía ser destinado a las Fuerzas Armadas y la Policía, acabó en manos de la delincuencia organizada, lo que derivó con la detención en Estados Unidos del exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna y la investigación a Calderón.