Fuerzas de paz surcoreanas de la misión de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS, por sus siglas en inglés) han comenzado la construcción de una carretera en el este de Sudán del Sur «para fomentar la confianza pública y potenciar la reconciliación» en plena intensificación de la violencia étnica en la zona administrativa de Pibor, donde miles de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares en las últimas semanas.
La carretera, de 115 kilómetros, conectará Pibor con la vecina Labrab, como prolegómeno a una serie de obras para reasfaltar las conexiones entre localidades remotas del este del país en una operación que, espera la ONU, terminará el próximo mes de abril.
Estas carreteras reacondicionadas serán esenciales durante las temporadas de lluvias en Sudán del Sur, ya que los recorridos actuales acaban siendo impracticables por la caída del agua.
Para el comandante de la misión de ingenieros surcoreanos, el coronel Jong Sil Park, semejante trabajo de infraestructuras ha sido concebido con un propósito de paz.
«Las buenas carreteras fomentan el comercio, permite el acercamiento entre miembros de diferentes comunidades y aceleran la entrega de la ayuda humanitaria que tanto necesita la gente», ha hecho saber a través de un comunicado publicado este viernes por Naciones Unidas.
Todo esto ocurre en un momento en que la ONU ha denunciado el desplazamiento forzado de al menos 30.000 residentes de Pibor durante los últimos meses por los enfrentamientos de finales del año pasado entre miembros de las comunidades murle y nuer, que han dejado cerca de 60 muertos.
Fuente: (EUROPA PRESS)