El Gobierno ha convocado este viernes las nuevas ayudas de 450 millones de euros para el 5G, que cubrirán la instalación de fibra hasta la torre en emplazamientos de telecomunicaciones situados en localidades de menos de 5.000 habitantes a los que no se prevé su llegada antes de 2025.
El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha publicado este viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la hoja de bases y primera convocatoria de las ayudas a las que se concurrirá a nivel provincial.
De los 450 millones de euros, se prevé ejecutar 374,5 millones de euros este año, el 83% del total, mientras que en 2023 se transferirían los 73,5 millones de euros restantes. Burgos, con 20 millones de euros, y Guadalajara, León y Teruel, con algo más de 18 millones de euros, son las provincias a las que se destinará una mayor aportación.
El Ejecutivo espera que las ayudas cubran al menos 3.500 emplazamientos existentes y mejoren también la cobertura en carreteras, vías de ferrocarril y zonas fronterizas con Portugal y Francia.
Los receptores de las subvenciones deberán realizar las obras de manera que en los conductos puedan entrar hasta cuatro operadores, así como disponer de una oferta mayorista pública a la que se puedan acoger los operadores.
Los proyectos presentados podrán ejecutarse hasta finales de 2025 y optar a una intensidad de la ayuda de hasta el 90%. Asimismo, deberán estar en servicio al menos diez años desde su terminación.
El plazo final para solicitar las ayudas será el próximo 14 de noviembre, diez días después de la publicación, dado su carácter de urgencia.
El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha señalado que se podrán proclamar varios adjudicatarios en cada provincia para maximizar el alcance de las ayudas.
Asimismo, el Ejecutivo también ha puntualizado que las ayudas de Único 5G-Redes podrán llegar a municipios de menos de 10.000 habitantes, aunque en la primera convocatoria de este programa se limitará a aquellos de menos de 5.000 ciudadanos.
LAS AYUDAS A LA FIBRA A LA TORRE Estas ayudas, bautizadas como ‘Único 5G-Redes-Backhaul Fibra Óptica’, están destinadas a la conexión de las torres de telecomunicaciones que radian la señal que utilizan los móviles. Al conectarlas con fibra óptica en vez de con cable tienen más capacidad para recibir y enviar información a la red y son más sostenibles energéticamente, porque la fibra consume un 85% menos que el cable.
De esta forma, se evita que se produzca un embudo de información con la llegada del 5G, que multiplicará los datos y la cantidad de dispositivos conectados.
Se espera que a la convocatoria de estas ayudas acudan las empresas de torres de telecomunicaciones como Cellnex, Totem (Orange), Vantage Towers (Vodafone) y American Tower, que son los principales actores de este mercado en España.
En verano, el Ejecutivo ya lanzó unas subvenciones al 5G rural para construir nuevas torres 5G, pero quedaron desiertas ante el temor de las ‘torreras’ de que los operadores no instalaran allí sus equipos, ya que la Unión Europea prohíbe, de momento, subvencionar este material de las empresas de telefonía llamado equipamiento activo.
En su comparecencia en la Comisión de Presupuestos, la secretaria de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, María González Veracruz, señaló que el Ejecutivo continúa «trabajando arduamente» para que Bruselas permita convocar ayudas para este extremo de la red, de las que podrían beneficiarse los operadores como Telefónica, Orange, Vodafone y MásMóvil para extender su cobertura 5G.