El tenista español Rafa Nadal resultó eliminado este miércoles del Abierto de Australia, primer ‘Grand Slam’ de la temporada y en el que defendía título, tras caer en tres sets (6-4, 6-4, 7-5) ante el estadounidense Mackenzie McDonald y después de jugar lesionado desde el final del segundo.
El español, primer favorito en Melbourne Park, tuvo que pedir atención médica en el tramo final del segundo parcial, cuando ya había perdido el primero e iba 5-3 abajo. Fue primero tratado en la propia pista por un problema a la altura de la cadera izquierda y después incluso la abandonó para regresar e intentar remontar un duelo.
El ganador de 22 ‘Grand Slams’ logró continuar en la pista de una Rod Laver Arena entregada a su figura, pero, visiblemente mermado y pese a su resistencia, no pudo evitar la derrota y decir adiós a su andadura en el primer ‘grande’ del año.
De todos modos, este percance llegó cuando el de Manacor estaba siendo superado por un McDonald, número 65 del ranking mundial y que estaba jugando a un gran nivel, dominando casi siempre y sin dejar que su rival pudiese llevar la iniciativa. Salvo, curiosamente, en la tercera manga, Nadal nunca pudo mandar en el marcador para tratar de mermar la confianza del estadounidense, muy seguro con el saque y con su ‘drive’, con el que no perdonó las bolas cortas que le dejó el balear.
El estadounidense firmó 42 golpes ganadores, 14 de ellos con el servicio, con el que apenas ofreció resquicios a Nadal, por sólo 22 errores no forzados, muchos de ellos con el revés, donde más sufrió. Pero fue suficiente para superar al español, que no tuvo nunca buenas sensaciones, sobre todo con su mejor arma, su ‘drive’, con el que encadenó más errores de los habituales.
Tras los problemas para deshacerse del británico Jack Draper en su estreno, el actual campeón esperaba dar un mejor nivel ante el americano, pero desde el principio le costó encontrar su mejor tenis sobre una pista techada. Empezó con ‘break’ el partido y el primer set se le puso muy cuesta arriba con otro más en el quinto juego. Ahí llegó un amago de reacción con una rotura, pero McDonald acertó a cerrar el set aunque el manacorí tuvo un 30-40 con 5-4 que no pudo aprovechar.
En el segundo, las cosas no comenzaron mejor. Nadal perdió por tercera vez su servicio, además en blanco, y el estadounidense no aflojó. Aún así, el primer cabeza de serie fue capaz de no descentrarse y recuperar la desventaja en el cuarto juego (2-2). Sin embargo, en el séptimo, el guión iba a cambiar ya definitivamente en su contra, con un nuevo ‘break’ y la aparición de los problemas físicos.
El tenista español no pudo evitar, pese al parón y a la atención médica, verse dos sets abajo, pero, fiel a su carácter, decidió continuar, aunque el físico no le acompañaba. McDonald no se relajó, se centró en mantenerse sólido al servicio y esperó paciente que apareciese una oportunidad al resto. Desperdició la del noveno juego, pero no el óptimo 0-40 del undécimo y rompió para poner fin al dolor del de Manacor, que firmó su despedida más tempranera en Melbourne desde que en 2016 cayese en su debut ante Fernando Verdasco.
FUENTE: (EUROPA PRESS)