Las 50 primeras unidades puestas a la venta en Francia del Citröen Ami Buggy, una edición limitada del Ami, se han vendido en tan solo 18 minutos, según ha señalado la marca automovilística en un comunicado este miércoles.
Este compacto de 2,41 metros de largo y 1,39 metros de ancho es 100% eléctrico y, según la firma, «está pensado para la aventura» y el ocio al aire libre con sus rasgos procedentes de los todocaminos y de «mitos» de la historia de Citroën como el Méhari.
Esta edición especial cuenta con 75 kilómetros de autonomía y puede alcanzar una velocidad máxima de 45 kilómetros por hora. Además, la recarga de la batería se realiza con un enchufe estándar de 220 voltios, «el mismo que se usa para el smartphone», ha matizado Citröen.
En cuanto al diseño, las puertas desaparecen y se sustituyen por unas barras metálicas, mientras que las ruedas, de 14 pulgadas, son en color dorado con tapas decorativas negras. Asimismo, incorpora una capota de tela y un alerón en el techo.
La marca ha hecho hincapié en que con este vehículo se puede entrar «con libertad» en las zonas de bajas emisiones de las ciudades debido a su motorización eléctrica y también ha incidido en la facilidad para estacionarlo debido a sus reducidas dimensiones.
En ese sentido, cuenta con dos plazas y con 63 litros de capacidad de carga delante del asiento del pasajero (suficientes para una maleta mediana, según la firma) y también con espacio en la parte trasera.