La Inteligencia del Ejército de Colombia sostiene que las protestas en las instalaciones de una petrolera en una zona rural del municipio de San Vicente del Caguán, en Caquetá, que dejaron dos muertos y 84 secuestrados –ya liberados– habrían sido financiadas por disidencias de la desaparecida guerrilla de las FARC.
Las autoridades colombianas detallan que las estructuras ’Jorge Briceño’ y ’Miller Perdomo’ estarían detrás de unas protestas, que finalizaron este sábado después de varios días en los que 78 policías y seis trabajadores de la petrolera fueron retenidos, ha informado la cadena RCN.
Según los informes del Ejército, ambas estructuras están lideradas en esa región por un conocido de las autoridades, Alexander Díaz Mendoza, alias ’Calarcá’, quien ’’habría movilizado a más de 3.000 personas’’ mantener e intensificar los bloqueos que se produjeron en la zona durante el último mes.
Otro de los señalados por jalear supuestamente las protestas es Wilmer Andrés Lugo Olaya. Ambos habrían facilitado recursos y material valorado en 500 millones de pesos colombianos (cerca de 100.000 euros) para hacer frente a la Policía.
En la mañana del pasado jueves un grupo de personas irrumpió en las instalaciones que la compañía petrolera Emerald Energy tiene en Los Pozos, en plena Amazonia colombiana, en señal de protesta por el incumplimiento de algunos de los compromisos de la empresa con las poblaciones de alrededor, como pavimentar algunas de las vías de acceso.
Hubo dos muertos como consecuencia de los choques entre campesinos y los agentes, un civil y un subteniente de la Policía. Las protestas, que se recrudecieron el miércoles tras un mes, dejaron 40 heridos y cerca de un centenar de personas retenidas, si bien esta sábado fueron puestas en libertad.
Fuente: (EUROPA PRESS)