Pacientes y especialistas en diferentes disciplinas, reunidos con motivo de la séptima edición del ‘Foro online sobre Cáncer de Pulmón: un frente común ante los retos’, han enfatizado la necesidad de adoptar medidas de prevención que reduzcan el número de diagnósticos de esta enfermedad, que afecta ya a casi 30.000 personas cada año en España y se espera que este número aumente en los próximos años.
Además, en el marco de la primera sesión del encuentro, organizado por la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACaP) y Fundación MÁS QUE IDEAS, se ha destacado la necesidad de implementar más políticas de control del tabaquismo dirigidas a evitar el inicio del consumo en las personas adolescentes y jóvenes, así como de otras medidas que actúen frente a otros factores de riesgo, como el amianto, el radón o la contaminación.
«Cuando hablamos de cáncer de pulmón hay aspectos vitales que no pueden olvidarse. Así, abordar la prevención, con la adopción de hábitos de vida saludables o permaneciendo alerta ante potenciales síntomas; el diagnóstico precoz, para hallar el tumor en estadios iniciales, o la mejora del bienestar de las personas afectadas, con una atención integral a sus necesidades, resultan esenciales para avanzar en el abordaje que todas y todos deseamos», ha señalado el presidente de AEACaP, Bernard Gaspar.
Por su parte, el cofundador de Fundación MÁS QUE IDEAS, Diego Villalón, ha avisado de que falta mayor apoyo social y compromiso institucional frente al cáncer de pulmón. «No debemos olvidar que es uno de los tipos de cáncer de mayor incidencia, con mayores repercusiones en la vida de las personas afectadas y prevenible en la mayoría de los casos», ha dicho.
Cada año casi 30.000 personas son diagnosticadas de un cáncer de pulmón en España. El tabaquismo es el principal factor de riesgo y se relaciona con alrededor del 80 por ciento de los casos. «En el ámbito del tabaquismo se ha recorrido un camino significativo pero todavía queda mucho por hacer, máxime cuando se observa un consumo creciente de tabaco en nuevos formatos entre las generaciones más jóvenes. En este sentido, sería muy positivo ampliar al máximo los lugares libres de humo, apostar por el empaquetado genérico e impulsar medidas para proteger a aquellas personas que son fumadoras pasivas», ha apostillado Gaspar.
Además de las medidas para el control del tabaco, las personas participantes también han puesto la mirada en otros factores de riesgo asociados al cáncer de pulmón. El radón, el asbesto (amianto) o la contaminación también aumentan la probabilidad de tener un cáncer de pulmón y, por tanto, son necesarias medidas de protección que reduzcan la exposición a estos factores de riesgo.
Asimismo, más del 70 por ciento de los diagnósticos se producen cuando la enfermedad está en una fase avanzada. En este sentido, Villalón ha adelantado que los síntomas del cáncer de pulmón son comunes con otras enfermedades, lo cual retrasa la sospecha y la detección. «Además, estos síntomas son bastante desconocidos por la población y suelen aparecer cuando la enfermedad ha empezado a diseminarse. Tampoco ayuda la creencia errónea de que el cáncer de pulmón solo afecta a las personas fumadoras», ha enfatizado.
Realizar campañas de divulgación en la sociedad y agilizar los procesos diagnósticos son medidas prioritarias para lograr detectar el cáncer de pulmón lo antes posible. De igual modo, los programas de cribado poblacional, también conocidos como screening, permitirían detectar la enfermedad en personas de mayor riesgo, incluso antes de tener síntomas.
«Diagnosticar la enfermedad en fases iniciales, cuando las posibilidades de tratamiento con intención curativa son mayores. Estos programas de cribado consisten en una prueba de imagen, una Tomografía Computarizada (TC) de baja dosis basal con un seguimiento a cinco años y ya se han llevado a cabo en otros lugares del mundo en población de riesgo en base a categorías de edad y consumo de tabaco», ha dicho el cirujano torácico y representante de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), además de co-coordinador del proyecto ‘CASSANDRA’, Juan Carlos Trujillo-Reyes.
De igual modo, ha señalado la importancia de acotar mejor los criterios de inclusión y acompañarlo siempre de programas de cesación tabáquica. En este sentido, ha adelantado que el proyecto ‘CASSANDRA’ es un proyecto piloto de cribado de cáncer de pulmón que tiene como objetivo valorar la factibilidad de un programa de cribado de esta enfermedad en España.
Finalmente, la oncóloga médica y vocal del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), Ivana Sullivan, ha manifestado que la prioridad es ofrecer un abordaje multidisciplinar que permita una correcta coordinación entre todos los especialistas y departamentos implicados en el diagnóstico y tratamiento de las personas con cáncer de pulmón».
«La continuidad asistencial, el abordaje psicosocial y el manejo de los efectos secundarios son estrategias prioritarias que se abordarán en esta sesión con el propósito de mejorar el bienestar de pacientes y familiares. En este sentido, es crucial ofrecer un apoyo individualizado centrado en la persona porque el cáncer de pulmón es una enfermedad de gran complejidad por todo lo que implica, no solo para el paciente sino también para su entorno», ha zanjado Sullivan.