La vicepresidenta de Foment del Treball y candidata a presidir la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Virginia Guinda, ha asegurado este martes que está recibiendo «mucho interés» por sus planteamientos y un «interés real y apoyo» que se reflejará en las elecciones de la patronal del próximo 23 de noviembre.
Guinda será la única rival del actual presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, en esas elecciones, a las que concurre motivada por su «gran preocupación como empresaria», después de «tres años muy complicados» y ante el «inicio de una etapa igualmente muy complicada».
La aspirante a presidir la CEOE ha evitado valorar, en una entrevista en el Canal 24Horas, el mandato de Garamendi y ha preferido exponer su programa, que se basará en hacer una CEOE en la que «haya más escucha y más transparencia», con más atención a «los intereses de las patronales sectoriales y territoriales».
«El hecho de que haya intereses contrapuestos forma parte de la vida, es normal. CEOE tampoco debe hacer bandera de cualquier tipo de tema, pero cuando hay pluralidad y se pueden hablar los temas de manera más abierta y transparente, se pueden abordar de manera más compleja», ha comentado Guinda.
Guinda formalizó su candidatura la semana pasada, con 37 avales de vocales, de un total de 789, y los apoyos de Foment del Treball, Acogen, la Asociación Profesional Nacional de Gestores Administrativos (APNGA), Faconauto, Fecic y el Colegio de Gestores Administrativos, que suman un total de 55 votos.
«Si casi gano, pero no gano, la Junta de CEOE es constituyente. Garamendi, en ese caso, tendría que elegir a su Comité Ejecutivo y no sé si me invitaría», ha dicho sobre su futuro en las elecciones.
REFORMA LABORAL «CORTA» Y BÚSQUEDA DE VOTOS Guinda también se ha referido a algunos de los temas que le tocará abordar si llega a la presidencia de la CEOE.
La negociación más inmediata entre la patronal, los sindicatos y el Gobierno es la del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, tiene la intención de subir.
«Yo le diría a la vicepresidenta que hay que subir algunos salarios y bajar algunas cotizaciones salariales. El Gobierno está enfocando la negociación con el peso de la crisis únicamente sobre los empresarios. Eso que a lo mejor está muy bien para ganar votos, no es una buena receta para la economía. Hay que repartir los esfuerzos», ha comentado.
Sobre la otra medida impulsada por Díaz en esta legislatura, la reforma laboral, la candidata a la presidencia de la CEOE ha recalcado que «se ha vuelto a quedar corta», ya que no contempla nuevos modelos de empresas y mantiene el modelo laboral «más intervencionista de Europa».
«Que se mantenga el empleo y que se genere más empleo, eso es lo que necesitamos. Yo no sería complaciente con los datos, a pesar de que no los voy a calificar de negativos en absoluto», ha añadido.
Guinda también se ha pronunciado sobre los nuevos impuestos del Gobierno a la banca y las energéticas, que en su opinión no están bien planteados. Para Guinda, estas medidas generan «un clima de inseguridad jurídica que dificulta a los empresarios tomar decisiones de inversión y financiación».
En el caso concreto de los impuestos a las compañías energéticas, Guinda, que ha trabajado como asesora en este sector, ha señalado que el Gobierno «no está visualizando los efectos adversos de medidas de este tipo», que afectarán a la creación de empleo.
En su lugar, la vicepresidenta de Foment propone abordar una revisión del gasto público en lugar de crear nuevos impuestos.
COHESIÓN SOCIAL Aunque ha evitado opinar sobre cuestiones políticas aduciendo que como vicepresidenta de Foment se centra más en la economía y en los temas laborales, Guinda ha terminado respondiendo a las preguntas sobre la modificación del delito de sedición.
En su opinión, los empresarios deben implicarse «de manera más activa» en cuestiones políticas y realidades «que afectan a la cohesión social», aunque teniendo siempre como prioridad los presupuestos.
«Hay determinados aspectos de la política, sobre todos los relacionados con la cohesión social, en los que los empresarios deberíamos emplearnos más a fondo», ha apuntado Guinda, y ha citado otras cuestiones como el acceso a la vivienda o el fracaso escolar.
PREVÉ SUBIDAS EN EL IPC El Índice de Precios de Consumo (IPC) aumentó tres décimas en octubre en relación al mes anterior y recortó de golpe su tasa interanual 1,6 puntos, hasta el 7,3%, su cifra más baja desde enero, según los datos definitivos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Esa cifra «continúa siendo preocupante» para Guinda y cree ese descenso «se debe más al reflejo de la economía real en Europa y no solo en España».
«Cuando empiece el frío, que está empezando, probablemente vuelva a subir», ha advertido.
Guinda observa en estos datos «el inicio de una crisis» y pide al Gobierno que revise las cotizaciones sociales y el gasto público.