El Gobierno de Canadá ha anunciado este miércoles un paquete de sanciones contra Irán, el undécimo desde octubre de 2022, por sus ’’continuas violaciones’’ de los Derechos Humanos, dirigido en esta ocasión a nueve personas y una entidad.
Entre las nueve personas señaladas por el Gobierno canadiense hay miembros de la llamada Policía de la Moralidad, a la que se responsabiliza de la muerte de la joven Mahsa Amini, detenida por supuestamente por llevar mal el velo, que desencadenó una ola de protestas en todo el país.
Las personas sancionadas incluyen un comandante adjunto del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, por la represión de las protestas en la provincia de Sistán y Baluchistán que dejó decenas de muertes, y la junta directiva de Paravar Pars, ’’productor clave’’ de drones que estarían siendo utilizados en la ’’injustificable’’ invasión rusa de Ucrania.
Por último, también han incluido en esta nueva batería de sanciones a la prisión de Rajaei Shahr, situada en las afueras de la ciudad de Karaj, en el norte de Irán, y que vendría a ejemplificar ’’la brutalidad del régimen’’ ya que entre sus muros se ha cometido ’’un número récord de ejecuciones estatales’’.
’’El compromiso de Canadá con los Derechos Humanos es inquebrantable y siempre daremos voz a quienes necesitan nuestro apoyo, como las mujeres, los hombres y los niños de Irán’’, ha dicho la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Melanie Joly.
’’Continuaremos haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para responder a las acciones desestabilizadoras del régimen iraní, que afectan no solo al pueblo iraní, sino que tienen repercusiones para la paz y la seguridad mundiales’’, ha añadido.
Las sanciones se unen a medidas similares anunciadas ya por la Unión Europea, Reino Unido y Estados Unidos. Con ellas, los activos de los señalados que pudieran tener en cualquiera de estos países son congelados, a la vez que se prohíbe tratos comerciales, o de cualquier tipo, con estas personas y entidades.
Fuente: (EUROPA PRESS)
