Fuerzas del movimiento fundamentalista afgano talibán y guardias fronterizos iraníes han protagonizado en las últimas horas un nuevo enfrentamiento por motivos todavía bajo investigación, en el último episodio de meses de tensiones en los pasos aduaneros entre ambos países.
El último enfrentamiento ha tenido lugar en torno al mediodía de este sábado en Makki, entre la provincia suroriental afgana de Nimruz y la provincia iraní de Sistán y Baluchistán, y ha involucrado disparos de artillería y armas ligeras, de momento sin víctimas que lamentar, según la agencia semioficial de noticias iraní Tasnim.
Tras el final de los enfrenamientos, representantes de la guardia fronteriza y de los talibán han convocado una reunión de emergencia ’’para investigar las causas de la tensión’’.
Los enfrentamientos han coincidido durante una reunión del ministro talibán de Exteriores, Amir Jan Muttaqi, con el embajador iraní en Kabul, Hasán Kazemi Qomi, en medio de crecientes tensiones entre los dos países por los derechos de agua, concretamente en torno al agua del río Helmand, también conocido como Hirmand.
Las autoridades iraníes llevan años acusando a Afganistán de limitar el flujo de agua a través de la construcción de presas y han argumentado que esto viola un acuerdo de 1973 en el que Kabul se comprometió a que una media de 820 millones de toneladas métricas de agua desembocaran en Irán.
A ello se suman años de denuncias de las autoridades afganas, tanto talibán como civiles, contra el maltrato del que son objeto presos y refugiados afganos en Irán. El año pasado, cabe recordar, los talibán presentaron una queja formal ante el Gobierno iraní tras la publicación de una serie de vídeos en los que aparecían grupos de jóvenes iraníes mientras propinaban palizas a refugiados.
Fuente: (EUROPA PRESS)