Un trabajador humanitario de la ONG francesa Solidarités International ha muerto como consecuencia de un ataque de un grupo armado en la provincia de Cabo Delgado, en el norte de Mozambique.
La ONG ha explicado que este miembro del personal local de la organización ha sido atacado este domingo cuando viajaba en privado por una carretera hacia la ciudad de Palma, en la costa del océano Índico, para participar en las actividades de distribución de la organización.
«El asesinato de nuestro colega y de los civiles que viajaban con él nos conmociona y nos repele. En Mozambique o en cualquier otro lugar, la población civil nunca debe ser objeto de ataques», ha declarado el director general de Solidarités International, Kevin Goldberg, según un comunicado de la propia ONG.
«Nuestros primeros pensamientos están con las víctimas y sus familias, seres queridos y todos nuestros compañeros, afectados por la pérdida repentina de uno de nuestros miembros», ha agregado Goldberg.
La provincia de Cabo Delgado, azotada desde 2017 por un repunte de los ataques yihadistas, ha visto un empeoramiento de la inseguridad en la región. De hecho, la semana pasada, el principal partido de la oposición de Mozambique, la Resistencia Nacional Mozambiqueña (RENAMO), acusó al presidente del país, Filipe Nyusi, de ser «responsable por omisión por no haber recurrido a tiempo a la ayuda internacional».
A las críticas se sumó el también opositor Movimiento Democrático de Mozambique (MDM), que recalcó que «hubo desconcierto y caos en torno a la política de defensa». Asimismo, denunció que «el pueblo de Cabo Delgado está exhausto y no tolera más sufrimiento».
Cabo Delgado es escenario desde octubre de 2017 de ataques obra de milicianos islamistas conocidos como Al Shabaab, sin relación con el grupo homónimo que opera en Somalia y que mantiene lazos con Al Qaeda. Desde mediados de 2019 han sido reivindicados en su mayoría por ISCA, que ha recrudecido sus acciones desde marzo de 2020.