Los países miembros del G7 y Autralia han llegado a un consenso de imponer un precio máximo de 60 dólares, unos 57 euros al cambio, al precio del barril de petróleo ruso, en línea con la decisión unánime de los Estados miembros de la Unión Europea.
Con esta decisión, además de los Veintisiete, Canadá, Estados Unidos, Japón, Reino Unido y Australia se han comprometido a evitar que Rusia «se beneficie de su guerra contra Ucrania», apoyando la estabilidad en los mercados energéticos mundiales y minimizando los efectos económicos de la guerra, según han detallado los países en un comunicado conjunto.
Al igual que lo acordado en el seno de la Unión Europea, el límite del precio del barril de crudo ruso entrará en vigor el 5 de diciembre de 2022. Asimismo, los países del G7 y Australia han anunciado que armonizarán la implementación del límite de precios en sus jurisdicciones.
En tanto, los Estados han reafirmando su intención de eliminar gradualmente la dependencia del petróleo crudo y sus derivados, en especial los de origen ruso.
Y pese a sus pretensiones, han aclarado que el límite de precio de está diseñado no para el uso propio –ya que muchos de ellos esperan disminuir su dependencia del petróleo ruso pronto– sino para que los proveedores de servicios nacionales no vendan petróleo y sus derivados procedencia de Rusia a terceros países por encima de los 60 dólares, restrigiendo en gran medida los ingresos del Kremlin.
«Alentamos a los terceros países que buscan importar petróleo crudo y productos petrolíferos de origen ruso por vía marítima a aprovechar el tope de precios. Tomamos nota de que esto es en interés económico de estos países, ya que las importaciones por debajo del precio máximo ayudarán a reducir los precios de la energía y restringirán la capacidad de Rusia para beneficiarse aún más de la prima de guerra que ha estado ganando», ha detallado el G7 en su comunicado.
Con todo, los Estados se han comprometido a monitorear «de cerca» la efectividad y el impacto del precio máximo del petróleo.
«Estaremos preparados para revisar y ajustar el precio máximo según corresponda. (…) En caso de una revisión del precio, anticipamos incluir una forma de derechos adquiridos para permitir transacciones que se concluyeron antes de la revisión de conformidad con el precio máximo anterior», han agregado.