El presidente ruso, Vladimir Putin, ha acusado este martes a la comunidad internacional de tratar de «rescribir la historia» para debilitar a Rusia en plena invasión de Ucrania y ha lamentado que estas voces se estén volviendo cada vez «más agresivas».
«Los intentos por parte de un grupo de Estados de rescribir y remodelar la historia a nivel mundial se están volviendo más fuertes y se están extendiendo. Está claro que existe un objetivo respecto a nuestra sociedad, al menos el de intentar dividirla», ha manifestado Putin.
Así, ha señalado que la idea es «debilitar a Rusia y golpear su soberanía». «Este escenario, tal y como lo vemos, ha sido sometido a pruebas en algunos países, incluida Ucrania, y otros Estados», ha incidido.
«La distorsión de la historia mediante la implantación de mitos y la erosión de valores (…) sirve muchas veces para construir Estados y pueblos», ha continuado antes de añadir que «hay intentos de hacer lo mismo con Rusia», donde se construirá «una barrera a tiempo para defender nuestros intereses».