La Comisión Europea y la Unión Africana han celebrado este lunes un encuentro para pasar revista a la relaciones y relanzar proyectos clave para el desarrollo del vínculo entre continentes, acordando el desembolso de 750 millones en inversiones de transporte y energía en África.
Los fondos provienen del programa de infraestructuras clave ‘Global Gateway’ con el que Europa pretende contrarrestar la influencia china en el continente. Del montante total que la Comisión Europea y los Veintisiete aspiran a movilizar, la mitad, 150.000 millones, irán a parar a la construcción de obras de importancia estratégica en África, han informado en un comunicado conjunto.
«África y Europa están unidas por una geografía y un destino común», ha subrayado la presidenta del Ejecutivo europeo, Ursula von der Leyen, quien ha pedido explotar todo el potencial a la relación y ha señalado que los fondos europeos son una «oferta positiva y sustancial» para fortalecer al continente.
En la reunión, las dos comisiones han acordado lanzar un programa de 750 millones de euros en apoyo de inversiones en infraestructura de transporte, incluidos los corredores estratégicos, digitalización y las conexiones energética en África.
También han tratado la crisis alimentaria global y celebrado la movilización de 570 millones de euros adicionales para África, elevando a casi 4.500 millones las subvenciones, además de grupos de trabajo para los desafíos a corto y largo plazo relacionados con el acceso y el precio de los fertilizantes.
Ambas comisiones han señalado el impacto de la guerra de Ucrania en las economías de Europa y África y se refirieron a las votaciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea de Naciones Unidas. Eso sí, solo la Comisión Europea ha condenado la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, «ilegal, injustificada y no provocada y que causa enorme sufrimiento».