El director general del Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, ha asegurado este viernes que la situación sigue siendo «potencialmente peligrosa» y ha insistido en que las partes se pongan se acuerdo para crear una zona de seguridad en torno a la central nuclear de Zaporiyia, en el sur Ucrania.
«Como hemos experimentado varias veces, la situación puede empeorar repentinamente y de forma dramática en cualquier momento (…) La situación sigue siendo extremadamente precaria y potencialmente peligrosa y la zona de protección sigue siendo una necesidad urgente», ha expresado Grossi.
Según ha informado el organismo de la ONU en un comunicado, el personal en la planta de Zaporiyia se mantiene todavía «en niveles reducidos» y se encuentra «bajo estrés psicológico» constante debido al conflicto activo en la región.
«La carga de trabajo del personal ha aumentado debido a la reducción de personal y la necesidad de reparar los daños causados por los bombardeos, además de garantizar la seguridad nuclear de la planta», ha indicado el organismo.
Estas declaraciones se producen después de que Grossi se reuniera con el responsable de la corporación estatal Rosatom, Alexei Lijachev, en un encuentro que la parte rusa describió como «sustancial, útil y franco», según la agencia de noticias TASS.
Por su parte, tal y como informó Rosatom, las autoridades de Rusia y Grossi han acercado posiciones sobre la central de Zaporiyia, considerada la mayor de Europa y controlada por Moscú desde principios de marzo.
El OIEA ha expresado en numerosas ocasiones su temor a que las instalaciones atómicas de Ucrania puedan sufrir algún tipo de accidente por los combates entre las fuerzas rusas y ucranianas. La planta de Zaporiyia ha sufrido desconexiones temporales de la red eléctrica como consecuencia de los ataques.
Fuente: (EUROPA PRESS)