El producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos experimentó un incremento del 0,6 por ciento en el tercer trimestre de 2022, según se desprende de la primera estimación del dato publicada este jueves por la Oficina de Análisis Económico del gobierno estadounidense (BEA, por sus siglas en inglés).
De esta forma, Estados Unidos abandonó la recesión técnica en la que había entrado en el segundo trimestre, cuando la economía se contrajo un 0,1 por ciento, tras haber observado una caída del 0,4% en los primeros tres meses del año. Se denomina recesión técnica, según el consenso de los economistas, a la situación económica que se da al encadenar dos trimestres de contracción económica.
La BEA ha explicado que, entre julio y septiembre, se registró un pequeño descenso en la inversión en inventarios privados, aunque se aceleró la inversión fija no residencial y aumentó el gasto del gobierno. También descendieron la inversión fija residencial y se desaceleró el gasto de los consumidores.
En términos puramente anualizados, la forma preferida por la Oficina de presentar los datos, el PIB de Estados Unidos se elevó un 2,6 por ciento en el tercer trimestre del año, frente al descenso del 0,6 por ciento del segundo trimestre. El descenso anualizado en el primer trimestre fue del 1,6 por ciento.
En el tercer trimestre, la BEA ha indicado que la tasa de ahorro de los estadounidenses fue del 3,3 por ciento, una décima menos que en los tres meses anteriores. De su lado, los ingresos disponibles aumentaron un 1,7 por ciento, tras haber caído un 1,5 por ciento entre abril y junio.