El consejero delegado de Indra, Ignacio Mataix, ha asegurado este miércoles que espera comenzar el proceso de firma del Futuro Sistema de Combate Aéreo Europeo (FCAS) en las próximas semanas después de los «avances significativos» para llegar a acuerdos de sus dos socios en el proyecto (Airbus y Dassault).
Mataix ha subrayado que el proceso de firma es largo y que incluye a los estados participantes (España, Francia y Alemania), por lo que no espera que el programa arranque su operativa a un ritmo completo hasta la primera mitad de 2023.
El directivo ha recordado que organizar este tipo de proyectos lleva tiempo. Indra ejerce como coordinador industrial en la parte de sistemas del programa, en el que España comparte peso con los otros dos países europeos. Las desavenencias entre los directivos alemanes y franceses, no obstante, han retrasado la puesta en marcha del mismo.
El programa cuenta con algo más de 500 millones de euros consignados en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023.
NUEVAS ADQUISICIONES Mataix, que ha intervenido durante la conferencia de analistas de la compañía tras presentar resultados, también ha asegurado que en las próximas semanas podría haber alguna novedad sobre adquisiciones de la firma, que este año ya ha incorporado varias compañías a su perímetro como la extremeña especializada en Identidad Digital Mobbeel y la firma de simuladores Simumak.
En los nueve primeros meses del año, Indra ha registrado un beneficio neto de 116 millones de euros, un 0,9% más que en 2021, al mismo tiempo que ha disparado sus ingresos en un 19% hasta los 2.694 millones de euros.
La compañía ha registrado un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 282 millones de euros, lo que supone un incremento del 9,7% respecto al año anterior. De esta partida, 154 millones de euros corresponden a Minsait, la filial de soluciones digitales del grupo, que ha crecido un 14,8% en esta magnitud en los nueve primeros meses del año, y 128 millones de euros a Transporte y Defensa, lo que supone un 6,6% más interanual.
Durante la conferencia, Mataix ha señalado que no se ha percibido «debilidad» en la demanda por parte de los clientes, lo que permite a la firma llegar al último trimestre de año con una cartera que roza los 6.000 millones de euros.
El directivo se ha mostrado «muy positivo» sobre la cartera de proyectos con los que cuenta la compañía y ha destacado también la recuperación del tráfico aéreo, un negocio donde Indra tiene un fuerte posicionamiento, como otro factor de crecimiento para la firma.
Una línea en la que también se ha manifestado el director general de TI, Luis Abril, quien ha señalado la creciente demanda de proyectos para Minsait.
Abril ha subrayado que la compañía llegará a los objetivos marcados de margen para su filial tecnológica, pero ha reconocido el impacto de la tendencia inflacionista en salarios del sector tecnológico.