El fabricante japonés de automóviles Toyota ha revisado a la baja su previsión de producción mundial para el cierre del ejercicio fiscal 2023 (que finaliza el próximo marzo), de forma que la nueva estimación se sitúa en 9,2 millones de unidades, unos 500.000 vehículos menos respecto a la cifra anterior.
El plan de producción de Toyota para diciembre prevé alcanzar una cifra de 750.000 vehículos ensamblados. El fabricante ha explicado que la revisión de las cifras de producción para el año fiscal 2023 tiene en cuenta «riesgos futuros» como la escasez de semiconductores.
«Continuaremos estudiando de cerca el suministro de piezas y trabajaremos con las partes relacionadas para considerar todas las medidas posibles para garantizar que podamos entregar la mayor cantidad de vehículos a nuestros clientes lo antes posible», ha añadido la empresa.
De las 750.000 unidades que el fabricante prevé ensamblar en diciembre, 250.000 unidades corresponderán a sus plantas en Japón y las otras 500.000 a las del resto de sus fábricas.
En ese sentido, la multinacional automovilística japonesa prevé realizar paradas en cuatro líneas de tres plantas distintas del total de las 28 líneas de producción disponibles en sus 14 centros productivos.
«Nos gustaría disculparnos nuevamente por los repetidos ajustes a nuestro plan de producción, debido a la escasez de piezas como resultado de la propagación de Covid-19 y por causar molestias considerables a nuestros clientes, que han estado esperando la entrega de vehículos, a los proveedores y otras partes interesadas», ha añadido la firma.