Estados Unidos ha afirmado este lunes que sigue «de cerca» las protestas en China y apoya el derecho de los manifestantes a salir a las calles «de forma pacífica» en el marco de las restricciones de la denominada política ‘COVID Zero’ en el gigante asiático.
«Se debe permitir a las personas el derecho a reunirse y protestar pacíficamente contra las políticas, leyes, dictados con los que estén en desacuerdo», ha dicho el portavoz de comunicación del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, John Kirby, según ha precisado Bloomberg.
Asimismo, Kirby ha aclarado que Estados Unidos no ve, por el momento, un «impacto particular» en la cadena de suministro después de que cientos de trabajadores de la principal planta de fabricación de iPhones de la compañía estadounidense Apple en China se enfrentaran hace unos días con el personal de seguridad.
La protesta en Foxconn Technology Group se inició a raíz de las demandas de los trabajadores por salarios impagados. La fábrica china, en la que trabajan más de 200.000 trabajadores, lleva cerrada desde octubre.
Las protestas en distintos puntos de China, como en Pekín, Wuhan o Shangái, estallaron a raíz del incendio en la ciudad de Urumqi, en la región occidental de Xinjiang, donde fallecieron al menos 10 personas debido, supuestamente, a la lenta respuesta de los bomberos por las restricciones contra el coronavirus.