La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, Maria Zajarova, ha denunciado que las palabras del Papa Francisco sobre chechenos y buriatos demuestran no solo su «rusofobia», sino también una «escandalosa perversión de la verdad».
«Esto ya no es rusofobia, sino una perversión. Recuerden que en los años noventa y principios de los 2000 nos dijeron exactamente lo contrario: que son rusos, eslavos (los) que estaban torturando a los pueblos del Cáucaso, y ahora se nos dice que son los pueblos del Cáucaso los que están torturando a los rusos», ha expresado, según ha recogido la agencia de noticias TASS.
Zajarova se refería a las palabras del Papa en las que ha asegurado que los «más crueles» en el marco de la guerra son los «chechenos y los buriatos», aludiendo a aquellos que viven en Rusia pero no tienen una tradición rusa.
«No es necesario que ponga el nombre y el apellido. ¿Por qué no nombré a (el presidente, Vladimir) Putin? Porque no era necesario, ya se sabía. Todos saben cuál es mi postura, con Putin o sin Putin, sin nombrarlo», ha expresado el Papa Francisco.
El Papa también ha explicado que ha hablado tres veces por teléfono con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski: «Pensé en viajar, pero tomé la decisión: si viajo, voy a Moscú y a Kiev, a las dos, no a un solo lugar».