El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha aseverado este lunes que es «complicado» entender la postura de Vox para con los Presupuestos de la capital y la región cuando el portavoz de la formación en Cibeles, Javier Ortega Smith, y su homóloga en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, «no se hablan».
«Es complicado entenderse con Vox cuando entre ellos no se hablan. Porque está claro que Ortega Smith y Monasterio no se hablan. Porque si se hablaran pondrían en común por qué Monasterio pese a que dice que son presupuestos humillantes asegura que no los puede bloquear, y Ortega no se sienta siquiera a hablar. En Vox tienen un problema. ?Cómo nos vamos a entender con ellos si ellos ni siquiera se entienden?», ha lanzado ante los periodistas desde Cibeles.
Previamente, el propio Ortega Smith había insistido en el ‘no’ de su Grupo al presupuesto presentado por el Gobierno municipal de PP y Cs, a pesar de no haber presentado ni enmienda a la totalidad ni parciales, y reclama que no solo las furgonetas B sino «todos los vehículos sin etiqueta» puedan entrar en la almendra central.
Para Martínez-Almeida, las posturas de Ortega Smith y Monasterio «son posiciones absolutamente contradictorias en un tema esencial», ya que ambos Presupuestos «actúan en el mismo territorio, porque los Presupuestos de la Comunidad afectan a los ciudadanos de esta ciudad».
Además, el regidor madrileño ha reprochado a la oposición que «ningún Grupo Municipal se ha querido siquiera sentarse a negociar» y que «tendrá que decir a los madrileños por qué ni siquiera quieren sentarse».
«Tendrá que explicar por qué no han intentado siquiera influir en los presupuestos ni han hecho atisbo de negociación. Tendrán que decir a los madrileños por qué cada día tienen que trabajar, mantenerse, y ellos no han hecho su trabajo. Frente a los madrileños que cada día lo pasan como lo están pasando, que tienen que afrontar dificultades, la oposición ha decidido que a ellos se les paga por decir no sin más», ha lanzado.
En este punto ha indicado que «el votante de Vox se debe preguntar por qué votó a Ortega Smith en el 2019» cuando es una persona «cuyo único discurso es no, no, no y no».