El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, espera que los Veintisiete puedan aprobar este lunes la nueva tanda de sanciones contra Rusia en respuesta al recrudecimiento de su ofensiva contra Ucrania, superando las reticencias que plantea Hungría que sigue siendo el principal obstáculo para adoptar el noveno paquete contra Moscú.
En declaraciones previas a la reunión de ministros de Exteriores de la UE en Bruselas, Borrell ha reconocido que persisten las diferencias entre los Veintisiete sobre la última ronda de sanciones contra Rusia, apuntando que requerirá más debate entre Estados miembros. «La propuesta ya ha sido discutida y, pensé que esta mañana podríamos decir ‘aprobado’, pero todavía no es el caso. Tal vez al final del día, pero aún quedan algunas cuestiones por acordar», ha asegurado a su llegada a la reunión.
En este sentido, ha admitido que el debate «no va a ser fácil», porque existen «diferentes puntos de vista» entre estados miembro, aunque ha instado a cerrar un acuerdo en el día de hoy, cuando se reúnan los embajadores de los Veintisiete. Fuentes europeas señalan a Hungría como el principal escollo para cerrar un acuerdo que requiere de la unanimidad de los Veintisiete y apuntan que, si bien Budapest no bloquea la decisión sí la «obstaculiza» generando distintos problemas y planteando «cuestiones de procedimiento».
A su llegada a la reunión la inmensa mayoría de ministros europeos han pedido avanzar en el noveno paquete para mandar un mensaje contundente a Rusia ante su ofensiva a objetivos civiles. Con especial vehemencia se ha expresado el ministro de Exteriores de Lituania, Gabrielus Landbergis, que ha alertado de que la UE no puede «estancarse» y quedarse «congelada» en la aprobación de sanciones contra Rusia.
«Desgraciadamente parece que nos hemos quedado un poco estancados en el frio y el barro, esperamos que no nos quedamos congelados en lo que tiene que ver con sanciones, ayuda macrofinanciera y envío de armas y que no esperamos a nada horrible que pase en Ucrania para desatascar», ha declarado, recalcando que el bloque debe aprobar más sanciones y no estudiar excepciones.
Por su lado, el titular de Exteriores irlandés, Simon Coveney, ha recalcado que la UE debe ser firme ante los crímenes rusos en Ucrania y asegurar que estas acciones «tienen un coste» para el Kremlin. «El paquete será acordado probablemente esta tarde, pero la forma del paquete es bastante claro», ha apuntado sobre las nuevas sanciones.
Su homólogo sueco, Tobias Billstrom, ha subrayado que los trabajos para la novena tanda de restricciones «siguen avanzando», mientras que el ministro finlandés, Pekka Haavisto, ha insistido en que el apoyo a Ucrania debe seguir «firme» en el frente económico y militar, además de con las sanciones.
Para el ministro de Exteriores de España, José Manuel Albares, ante la continuación de la guerra de agresión rusa «es hora» de que Europa siga actuando «con decisión» y palie la situación que viven los ucranianos, momento en el que ha subrayado que España «alzará la voz» para aprobar cuanto antes el paquete de ayuda macrofinanciera de 18.000 millones para Ucrania que sigue un plan alternativo en el Consejo de la UE también por el bloqueo de Hungría.
SANCIONES CONTRA LA GUARDIA REVOLUCIONARIA DE IRÁN Igualmente, los ministros tienen sobre la mesa nuevas sanciones para responder a la represión desatada en Irán, tras las protestas por la muerte bajo custodia de la joven Mahsa Amini, y el suministro de material militar a Moscú.
«Vamos a aprobar un paquete de sanciones muy, muy duro», ha avanzado el Alto Representante, quien ha explicado que en una llamada telefónica transmitió al ministro de Exteriores de Irán, Hosein Amirabdolahian, la denuncia por la segunda ejecución de una persona por su participación en las protestas prodemocráticas.
«Irán tiene que entender que la Unión Europea condenará enérgicamente y tomará todas las medidas posibles para apoyar a las mujeres iraníes, y a los manifestantes pacíficos y, por supuesto, rechazar la pena de muerte», ha asegurado Borrell.
Según ha adelantado el ministro sueco, la UE ampliará su ‘lista negra’ por violaciones de derechos humanos en Irán y añadirá a responsables de la Guardia Revolucionaria además de a personas implicadas en el envío de drones a Rusia.