El economista jefe de la región de América Latina y el Caribe del Banco Mundial, William Maloney, ha señalado que, a pesar de la coyuntura económica de los últimos años, la economía de Paraguay ha sido capaz de recuperar los niveles previos a la pandemia.
Durante su intervención en la Conferencia Magistral de Paraguay, en la que se analizaron las perspectivas económicas para el año 2023, Maloney ha destacado que Paraguay cuenta con «grandes expectativas» de crecimiento para el año que viene, pero es necesario continuar por la senda de las reformas para «seguir creciendo».
Además, respecto a la evolución económica de América Latina, el economista jefe ha resaltado los importantes logros que ha obtenido la región, lo que le ha permitido grandes avances en materia de crecimiento.
En esta misma línea, Maloney ha expresado que el contexto bélico de Ucrania está afectando a la economía generando una inflación en combustibles y alimentos, no solo en Paraguay, sino en toda América Latina. Sin embargo, ha destacado que los indicadores sociales se han recuperado en gran medida, aunque las secuelas a largo plazo requieren «políticas públicas» que ayuden a que esta recuperación sea «sostenible».
DESACELERACIÓN DE LA ECONOMÍA En dicho encuentro también ha participado el presidente del Banco Central del Paraguay, José Cantero, quien ha aportado el punto de vista del organismo central respecto a la inflación. En este sentido, ha considerado que el país se aproxima a la meta de convergencia y que la inflación se situará en el año 2023 en el 4,1%.
Asimismo, ha remarcado que las economías de América Latina están experimentando un crecimiento más lento debido, entre otros, a la tensión geopolítica o los problemas de suministros. «Los golpes que han recibido todas las economías del mundo son considerables y van a seguir», ha sostenido Cantero.
A esta cuestión del crecimiento se ha unido el ministro de Hacienda de Paraguay, Óscar Llamosas, quien ha puesto de manifiesto un problema «adicional» para la economía del país, como es la sequía.
En ese sentido, ha expresado que a principios de año se aguardaba un crecimiento económico en torno al 4%, pero la sequía más el contexto externo han provocado que la estimación de crecimiento económico para este año se sitúe en un 0,2%. No obstante, destacó que para el año 2023 las perspectivas son «positivas».
