La doctora Ana Ortiz, gerente del área de Salud de Farmasierra, asegura que es «esencial» llevar una dieta saludable, variada y equilibrada e hidratarse adecuadamente para proteger y reforzar el sistema inmunitario frente a infecciones respiratorias agudas.
También aconseja hacer ejercicio moderado de manera regular, evitar el estrés y cuidar el descanso. «Además, es importante, evitar los contrastes fuertes de frío y calor y llevar ropa adecuada», recomienda.
Tal y como ha recordado, tras más de dos años de pandemia, el sistema inmunitario ha cobrado una especial relevancia en la lucha contra los virus, especialmente los respiratorios. Según datos del Sistema de Vigilancia de Infección Respiratoria en España del Instituto de Salud Carlos III, el inicio de 2023 ha estado marcado por un aumento de casos notificados de virus respiratorio sincitial (VRS) en comparación con años anteriores, así como un incremento en tasas de hospitalización en mayores de 79 años tanto por VRS como por el virus de la gripe.
En concreto, el VRS constituye un importante problema de salud pública debido a la alta carga asistencial que provoca tanto en Atención Primaria como en los servicios de Urgencias y hospitalarios. En suma, es el segundo patógeno que causa más mortalidad en el mundo en lactantes, por detrás de la malaria; además el 75 por ciento de los bebés se infectan por VRS, de forma leve o grave, en su primer año de vida. Igualmente, el virus de la gripe estacional produce cada año entre 3 y 5 millones de casos graves, especialmente en grupos de riesgo como personas embarazadas, bebés y personas mayores. Es por ello que fortalecer el sistema inmune es esencial para prevenir este tipo de enfermedades.
«En principio, un cuerpo sano pone en funcionamiento su sistema inmune ante la agresión de patógenos», señala la doctora. No obstante, hay situaciones en las que el sistema inmunitario de las personas sanas se puede ver comprometido produciéndose una disminución de las defensas, por ello, «es importante ayudar a nuestro cuerpo para que el sistema inmune esté fuerte y en forma», destaca la doctora.
Algunas de estas situaciones pueden ser cambios de estación, épocas de frio y períodos de baja exposición al sol; encontrarse en periodos de convalecencia tras gripe o resfriados o simplemente adultos partir de los 50 años, cuando el sistema inmune empieza a perder efectividad en su funcionamiento y desarrollo (inmunosenescencia).
Finalmente, para fortalecer el sistema inmune, recomienda tener en cuenta la ingesta de algunos suplementos y probióticos específicos. «Hoy en día, existen algunos probióticos (microorganismos vivos, principalmente bacterias) que, tras ser ingeridos en cantidades suficientes, mejoran el equilibrio microbiano intestinal, tienen capacidad de estimular la reacción inmunitaria de nuestro cuerpo y confieren beneficios para la salud del huésped», señala Ortiz.
Fuente: (EUROPA PRESS)
