El Papa ha destacado que las mujeres son, en general, ’’valientes y generosas’’ aunque ha asegurado que, como en todos los lados, algunas son ’’neuróticas’’, durante una audiencia a las participantes de la 70ª Asamblea General de la Unión de Superioras Mayores de Italia.
’’Es propio de las mujeres ser generosas’’, ha señalado el Papa. Aunque ha reconocido a continuación que ’’a veces sí, hay algunas neuróticas’’. ’’Pero eso pasa un poco en todas partes, ¿no?’’, ha añadido.
El Pontífice ha aprovechado su discurso para advertir contra las ’’enfermedades de la vida consagrada’’ y ha señalado en particular la amargura ’’que es el licor del diablo’’.
’’Cuando se cultiva el vinagre en lugar de azúcar, algo no funciona. La amargura, la acidez del corazón, hace mucho mal. Por favor, cuando vean que en una comunidad alguna hermana está en esto, ayúdenla a salir de esta situación; ayúdenla a salir de la situación de la gente melancólica que siempre piensa: Pero, otros tiempos eran mejores, las cosas no van, que aquí, que allá… Este es el elixir del diablo, esta amargura, licor de amargura. Por favor, nada de esto, solo dejemos que el Espíritu nos dé esta dulzura, que es una dulzura espiritual’’, ha reflexionado .
Por ello, ha instado a que sean ’’sembradoras de esperanza’’, que no es lo mismo que sembradoras de optimismo. ’’De esperanza, que es otra cosa’’, ha especificado. Para el Papa, lo propio de la mujer es ’’dar vida, abrir caminos, llamar a otros’’. En este sentido, ha recordado que las mujeres fueron los primeros testigos de la Resurrección. Así, ha instado a las Superioras Mayores de Italia a ser sembradoras de esperanza ante las pocas vocaciones y la necesidad de interculturalidad en la vida consagrada.
’’Seamos realistas, pero sin perder la alegría, la audacia y la entrega plena de esperanza. Sus numerosos proyectos hablan de esta dedicación plena de esperanza. ¡Sigan por este camino!’’, ha insistido.
Fuente: (EUROPA PRESS)