La OTAN ya se encuentra inmersa en la carrera para elegir un nuevo secretario general aunque sin un favorito claro para reemplazar al noruego Jens Stoltenberg, en el cargo desde 2013 y que vio extendido un año más su mandato al coincidir su sucesión con el inicio de la guerra en Ucrania.
Las negociaciones entre aliados están en marcha con la vista puesta en encontrar el nombre adecuado para suceder al ex primer ministro escandinavo con la meta de la cumbre de líderes que se celebra en Lituania el próximo julio, explican varias fuentes aliadas consultadas por Europa Press, que apuntan que el nuevo jefe político de la OTAN asuma el cargo el 1 de octubre.
La elección del secretario general de la OTAN es un proceso informal de consultas diplomáticas entre aliados a nivel de embajadores, quienes en última instancia consensuan un nombre para un mandato de cuatro años que puede prorrogarse.
Si meses atrás se barajaba que Stoltenberg siguiera unos meses más, hasta abril de 2024, cuando la Alianza Atlántica celebrará su 75º aniversario con una cumbre de líderes en Estados Unidos, este escenario parece diluirse por la falta de claridad sobre cuando tendrá lugar dicha cita, aseguran las fuentes consultadas.
En un contexto marcado por la guerra de Ucrania, que ha ensalzado el papel de la OTAN, con la entrada de Finlandia, la adhesión en marcha de Suecia y el mayor nivel de coordinación entre Estados Unidos y Europa en años, varios aliados enfatizan la necesidad de contar con un político con perfil fuerte frente a Rusia y que sea un convencido del vínculo entre Europa y Estados Unidos.
¿PRIMERA MUJER AL FRENTE DE LA OTAN? Pese a que la Alianza Atlántica se ha propuesto que una mujer pueda dirigir por primera vez en la historia la organización, el hecho de que los aliados apuesten por un primer ministro o presidente limita mucho las opciones de un liderazgo femenino.
Sobre la mesa el nombre más repetido los últimos tiempos es el de la primera ministra estonia, Kaja Kallas, si bien su perfil asertivo ante Moscú puede restarle apoyos entre otros aliados y la extensión del mandato de Stoltenberg el pasado año ahuyentó en cierta medida su candidatura. En todo caso, los países bálticos y Polonia podrían realizar una propuesta única para promover un secretario general que provenga de la región.
Otras mujeres en la terna serían la actual primera ministra danesa, Mette Frederiksen, la vice primera ministra canadiense, Chrystia Freeland, o la ex Alto Representante de la UE, la socialista italiana Federica Mogherini.
ESPAÑA NO TIENE CANDIDATO, RUMANÍA DEMASIADOS Por su lado, España no cuenta con un candidato para dirigir la Alianza Atlántica, pese a la buena imagen internacional que tiene el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lo que le ha llevado a estar presente en las quinielas durante meses, según explican las fuentes consultadas.
El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, es uno de los líderes europeos en activo al que más se le vincula con el puesto, a la postre Países Bajos ha aportado tres secretarios generales a la organización militar. Mientras que la opción del presidente rumano, Klaus Iohannis, emergía con fuerza como primer secretario general de la OTAN de Europa del Este, más concretamente de un país de pasado comunista, pero la reciente renovación del vicesecretario general, el también rumano Mircea Geoana, hasta octubre de 2024 echa por tierra las opciones de Iohannis.
Fuente: (EUROPA PRESS)