Las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), el grupo paramilitar más importante de Sudán, mantiene sus posiciones en torno a la base militar de Meroue, en el norte del país, a pesar de los avisos del Ejército para que se retiren de la zona y en medio de un aumento de la tensión en el país tras el aplazamiento del esperado acuerdo de transición política.
La ciudad de Meroue, a 330 kilómetros al norte de la capital, Jartum, lleva tres días siendo escenario de una tensa calma ante el despliegue de esta formación paramilitar dirigida por Mohamed Hamdan Dagalo, alias ’Hemedti’, y que ha incrementado su actividad tras el aplazamiento del acuerdo de transición por discrepancias sobre la integración de la organización en un futuro ejército unificado de Sudán.
A su llegada a Meroue, unidades del Ejército rodearon a las RSF y reclamaron su retirada de la zona, si bien los paramilitares se negaron y la organización defendió posteriormente que su presencia en el lugar es parte de su misión para luchar contra el tráfico de personas y drogas, según recogió este pasado jueves el portal sudanés de noticias Sudan Tribune.
Este viernes, el enviado especial de Al Arabiya ha indicado que los paramilitares siguen en sus puestos a la espera de las conversaciones de urgencia que han comenzado en esta ciudad entre responsables paramilitares y de las Fuerzas Armadas que lidera Abdelfatá al Burhan.
La situación dentro de la ciudad es de calma relativa, sin que hasta el momento se haya visto ningún tipo de incremento de presencia militar para responder al posicionamiento de los paramilitares y la circulación de la población civil sigue siendo fluida, en particular en presuntos objetivos estratégicos como puente que enlaza Meroue con la ciudad de Karima.
El acuerdo marco alcanzado por las partes contemplaba la firma de una declaración política el 1 de abril, el pacto de una nueva Constitución de transición el 6 de abril y la formación del gobierno el 11 de abril, si bien nada de eso ha tenido lugar por las diferencias en torno al aparato de seguridad.
La formación del nuevo gobierno de transición tiene objetivo sacar al país de la crisis en la que se vio sumido por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que Al Burhan derrocó al entonces primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
Hamdok fue nombrado para el puesto tras un proceso de diálogo entre militares, partidos y organizaciones civiles iniciado a raíz del derrocamiento en abril de 2019 del régimen de Omar Hasán al Bashir con el objetivo de aplicar una serie de reformas destinadas a allanar el camino a la celebración de elecciones en el país africano, aún pendientes.
Fuente: (EUROPA PRESS)