El Ejército de Sudán y los paramilitares de las Fuerzas de Acción Rápida (RSF) han comenzado este sábado enfrentamientos armados en el centro y en el sur de la capital del país, Jartum, y en la ciudad de Meroe, a 200 kilómetros al norte, en la entrada en colapso de las paralizadas negociaciones para la consecución de un acuerdo de transición política hacia un gobierno civil en el país, sumido en una espiral de caos desde el derrocamiento en 2019 de Omar al Bashir.
En torno a las 10.30 de la mañana, las RSF han denunciado, en un comunicado recogido por el Sudan Ajbar, que el Ejército ha lanzado un ataque sorpresa contra sus posiciones en la capital con una ’’numerosa fuerza de ataque’’ que ha asediado primero a las fuerzas allí presentes ’’para luego atacarlas con todo tipo de armas pesadas y ligeras’’.
’’Que Dios proteja a Sudán’’, han remachado las fuerzas dirigidas por el número dos del país, el cabecilla paramilitar Mohamed Hamdan Dagalo, alias ’Hemedti’.
La corresponsalía de Al Yazira también ha constatado disparos muy cerca de la residencia del líder militar del país, Abdelfatá al Burhan, en medio de escenas de pánico entre la población y de momento sin información sobre la situación exacta de general.
Asimismo, la cadena panárabe informa de enfrentamientos similares en Meroe, donde las RSF llevaban desde el jueves apostadas en torno a una base militar y desoyendo las advertencias del Ejército para evacuar el lugar.
Los enfrentamientos han estallado solo horas después de que Al Burhan y ’Hemedti’ manifestaran su intención de emprender negociaciones de urgencia para resolver sus diferencias sobre el proceso de integración de ambas fuerzas en un ejército unificado, tensiones que han paralizado un acuerdo clave de transición política en el país.
LA TRANSICIÓN CAE EN BARRENA Los enfrentamientos suponen la culminación de semanas de discordia justo el país parecía estar a punto de cerrar con éxito el llamado Acuerdo Marco de Transición que supondría la entrega del poder a un gobierno civil.
Sin embargo, sucesivos aplazamientos por las diferencias entre Al Burhan y ’Hemedti’ acabaron por aplazar la declaración política el 1 de abril, el pacto de una nueva Constitución de transición el 6 de abril y la formación del gobierno el 11 de abril.
Este gobierno tenía un objetivo fundamental: sacar al país de la crisis en la que se vio sumido por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que Al Burhan derrocó al entonces primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
Hamdok fue nombrado para el puesto tras un proceso de diálogo entre militares, partidos y organizaciones civiles iniciado a raíz del derrocamiento en abril de 2019 del régimen de Al Bashir con el objetivo de aplicar una serie de reformas destinadas a allanar el camino a la celebración de elecciones en el país africano.
Fuente: (EUROPA PRESS)