Al menos 17 personas murieron y más de un centenar resultaron heridas en los combates registrados el miércoles en la capital de Sudán, Jartum, según ha informado el Sindicato de Doctores de Sudán, horas después de que el Ejército sudanés confirmara la suspensión de las conversaciones con las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) de cara a un alto el fuego permanente tras los combates que estallaron el 15 de abril entre ambas fuerzas.
El organismo ha señalado en un comunicado en su cuenta en la red social Facebook que 36 de los 106 heridos tuvieron que ser intervenidos quirúrgicamente, antes de alertar de que el número de víctimas ’’sigue aumentando’’. ’’El personal médico del Hospital Universitario Bashaer ha estado bajo gran presión a la hora de tratar los casos debido a su gran número y al poco personal presente’’, ha explicado.
’’Pedimos a todos los doctores y personal médico que estén cerca del hospital que echen una mano a sus colegas del Hospital Bashaer, dentro de lo posible y teniendo en cuenta la seguridad de los movimientos’’, ha manifestado. La mayoría de las víctimas han sido registradas en el área de Mayo, en el sur de la capital.
Fuentes diplomáticas indicaron el miércoles en declaraciones a Europa Press que ’’las autoridades sudanesas tuvieron que suspender su participación a las conversaciones de alto el fuego con las RSF, ya que estas últimas no han respetado el acuerdo de evacuar los hospitales y las casas de civiles que habían ocupado (en el marco de los enfrentamientos)’’.
Las conversaciones arrancaron a principios de mayo en la ciudad de Yedá y derivaron en una declaración de compromiso sobre la protección a los civiles y dos breves treguas, si bien todas ellas han sido violadas en repetidas ocasiones por las partes en conflicto. De hecho, el Ejército y las RSF acordaron el lunes prorrogar cinco días el último alto el fuego, si bien durante la jornada del martes se registraron intensos enfrentamientos en la capital, Jartum, y otras localidades situadas en los alrededores de la ciudad.
Las hostilidades estallaron en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición abierta tras el derrocamiento en 2019 del entonces presidente, Omar Hasán al Bashir, dañada por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que fue derrocado el primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
Sin embargo, la negativa del líder de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, alias ’Hemedti’, a las condiciones de esta reintegración derivaron en unas tensiones que provocaron aplazamientos en la formación del nuevo gobierno de transición y, finalmente, en unos combates que han dejado más de 700 muertos, según el balance oficial, si bien un sindicato de médicos sudanés ha elevado a más de 860 el número de fallecidos.
Fuente: (EUROPA PRESS)