Las autoridades de Sudán han prorrogado hasta el 15 de junio el cierre del espacio aéreo en el país, debido a los combates entre el Ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), que han dejado cientos de muertos.
’’La Autoridad de Aviación Civil emite un boletín para pilotos (NOTAM) que amplía el cierre del espacio aéreo sudanés a todo el tráfico aéreo hasta el 15 de junio de 2023’’, reza un comunicado del Aeropuerto Internacional de Jartum a través de su perfil oficial en la red social Twitter.
Así, ha indicado que esta medida únicamente presenta como excepción ’’la ayuda humanitaria y los vuelos de evacuación previa obtención de un permiso de las autoridades competentes’’.
El Ejército de Sudán suspendió su participación en las conversaciones en Arabia Saudí con las RSF para intentar pactar un alto el fuego ante los combates desatados el 15 de abril, según confirmaron fuentes diplomáticas en declaraciones a Europa Press.
Estas fuentes explicaron que ’’las autoridades sudanesas tuvieron que suspender su participación a las conversaciones de alto el fuego con las RSF, ya que estas últimas no han respetado el acuerdo de evacuar los hospitales y las casas de civiles que habían ocupado (en el marco de los enfrentamientos)’’.
Las conversaciones arrancaron a principios de mayo en la ciudad de Yedá y derivaron en una declaración de compromiso sobre la protección a los civiles y dos breves treguas, si bien todas ellas han sido violadas en repetidas ocasiones por las partes en conflicto. De hecho, el Ejército y las RSF acordaron el lunes prorrogar cinco días el último alto el fuego, si bien durante la jornada del martes se registraron intensos enfrentamientos en la capital, Jartum, y otras localidades situadas en los alrededores de la ciudad.
Las hostilidades estallaron en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición abierta tras el derrocamiento en 2019 de Al Bashir, dañada por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que fue derrocado el primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
Sin embargo, la negativa del líder de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, Dagalo, alias ’Hemedti’, a las condiciones de esta reintegración derivaron en unas tensiones que provocaron aplazamientos en la formación del nuevo gobierno de transición y, finalmente, en unos combates que han dejado más de 700 muertos, según el balance oficial, si bien un sindicato de médicos sudanés ha elevado a más de 860 el número de fallecidos.
Fuente: (EUROPA PRESS)