Castillo de Belalcázar (Córdoba)
El Castillo de Belalcázar, en la estratégica ubicación de Belalacázar, entre Toledo, Sevilla y Córdoba, ostenta diversos nombres a lo largo de su historia: Castillo de Belalcázar, Castillo de los Sotomayor y Zúñiga, o Castillo de Gafiq o Gahete. Lo que lo hace realmente destacado es su elevada altura, siendo la torre del homenaje la más alta de toda España con 47 metros de altura, que parece un periscopio que controla todo el territorio circundante. Su origen se remonta al siglo XV, construido sobre las ruinas de una fortaleza romana y, más tarde, musulmana. Esta fortaleza es una joya arquitectónica que conecta con un pasado de influencia romana y musulmana.
Castillo de Bellver (Palma de Mallorca)
El Castillo de Bellver, ubicado cerca de la ciudad de Palma, se distingue como un castillo gótico singular, siendo uno de los pocos castillos circulares de Europa. Esta fortaleza, que data del año 1300, fue encargada por el rey Jaime II como residencia real. Hoy en día, cumple un papel distinto como sede del Museo de Historia de la ciudad de Palma. Su arquitectura única y su posición estratégica sobre una colina ofrecen una experiencia fascinante para los visitantes, quienes pueden explorar su rica historia y disfrutar de impresionantes vistas panorámicas de la ciudad y sus alrededores.
Castillo de Cardona (Barcelona)
El majestuoso Castillo de Cardona, es un símbolo de la historia y la arquitectura medieval de Cataluña. Su origen se remonta al siglo IX, cuando fue construido como una fortaleza defensiva. A lo largo de los siglos, ha sido testigo de numerosos eventos históricos y ha sido escenario de batallas cruciales. Destaca por su impresionante torre de homenaje, que se alza con imponencia sobre la ciudad. Hoy en día, el Castillo de Cardona se ha convertido en un museo y un hotel parador, lo que permite a los visitantes sumergirse en su historia mientras disfrutan de una estancia única.
Castillo de Coca (Segovia)
El Castillo de Coca es una joya arquitectónica que combina elementos góticos, mudéjares y renacentistas. Construido en el siglo XV, destaca por su imponente fachada de ladrillos rojos y su elegante mezcla de estilos. Su posición estratégica junto al río Cega y su robusta estructura lo convirtieron en un punto de defensa clave. El interior del castillo alberga impresionantes salones con techos artesonados, decoraciones renacentistas y un patio de armas espectacular. El Castillo de Coca es un ejemplo excepcional de arquitectura militar y una ventana al pasado, que permite a los visitantes explorar la historia y la belleza de esta región de Segovia.
Castillo de Gormaz (Soria)
El Castillo de Gormaz es una fortaleza icónica que se alza sobre un monte, ofreciendo vistas panorámicas de la región. Su construcción se remonta al siglo IX, durante la ocupación musulmana de la península ibérica, y luego fue ampliado en el siglo X. Este castillo presenta una impresionante estructura de muros de piedra y numerosas torres de vigilancia. Durante su historia, desempeñó un papel crucial en las luchas territoriales entre musulmanes y cristianos. El Castillo de Gormaz es un testigo de la historia medieval de España y un lugar impresionante que atrae a los amantes de la arquitectura y la historia.
Castillo de Loarre (Huesca)
El Castillo de Loarre se yergue como un coloso desde el siglo XI, vigilando los campos de la Hoya de Huesca. Esta fortaleza es un ejemplo impresionante de arquitectura románica que ha perdurado en condiciones excepcionales hasta nuestros días. Sus robustas murallas y torres, meticulosamente conservadas, narran historias de tiempos medievales. Los visitantes pueden explorar sus intrincados pasadizos, patios y salones, adentrándose en un pasado lleno de intrigas y hazañas. El Castillo de Loarre es un testigo vivo de la historia de la región, un monumento que evoca la grandeza y la solidez de la Edad Media en España.
Castillo de Manzanares el Real (Madrid)
El castillo de Manzanares el Real es una fortaleza-palacio del siglo XV, que fue la residencia de la poderosa familia de los Mendoza. Está situado en un bello paraje natural, junto al río Manzanares y la sierra de Guadarrama. Su arquitectura combina elementos góticos y renacentistas, con influencias árabes. En su interior se pueden admirar tapices, pinturas, armaduras y muebles antiguos, además de disfrutar de una agradable visitar repleta de historia.
Castillo de Peñíscola (Castellón)
El Castillo de Peñíscola, asentado en un islote que la evolución convirtió en península, encierra dos finales casi míticos en su historia. En primer lugar, fue un bastión de los caballeros Templarios, quienes construyeron sus imponentes murallas antes de su disolución décadas después. Luego, fue el refugio del Papa Luna, figura central en el Gran Cisma de la Iglesia de Occidente, quien desde sus modestas estancias defendió su posición como Sumo Pontífice durante nueve años. La visita al castillo se centra en la simbología de los Templarios y en la determinación del Papa Luna. Completan este conjunto las murallas erigidas por Jaume I y finalizadas por Felipe II, formando un paisaje impresionante en la pintoresca Peñíscola.
Castillo de Peñafiel (Valladolid)
El Castillo de Peñafiel es un tesoro arquitectónico que se alza majestuosamente sobre la ciudad y es famoso por su inconfundible forma de barco invertido. Este castillo medieval, construido en el siglo X, ha sido testigo de siglos de historia. Su imponente estructura de ladrillos y su ubicación estratégica en la cima de una colina lo convirtieron en un baluarte defensivo clave. Hoy en día, el Castillo de Peñafiel alberga el Museo Provincial del Vino, donde los visitantes pueden explorar la rica tradición vitivinícola de la región y disfrutar de las impresionantes vistas de los viñedos circundantes. Es un lugar que combina historia, arquitectura y cultura vinícola en un solo destino.
Castillo de Santa Bárbara (Alicante)
El Castillo de Santa Bárbara se alza majestuosamente a 166 metros sobre el nivel del mar, presidiendo la bahía con una vista estratégica. Esta fortaleza, imbuida del aroma del mar, es mucho más que una estructura defensiva. En la actualidad, alberga el MUSA, el Museo de la Ciudad de Alicante, que brinda a los visitantes la oportunidad de explorar su interior a través de visitas guiadas y teatralizadas. Desde este enclave histórico, la historia se entrelaza con la cultura, y los visitantes pueden apreciar la belleza del castillo mientras descubren la rica historia de Alicante en un entorno inigualable.
Castillo de Tossa de Mar (Gerona)
El Castillo de Tossa de Mar nos invita a un viaje pintoresco a través de estrechas callejuelas que anticipan la maravilla que aguarda en su cumbre. Perchado en un promontorio, con vistas panorámicas de las playas de la bahía de Tossa, este castillo evoca una época en la que las costas mediterráneas se enfrentaban a asaltos de corsarios y piratas. Su construcción data del siglo XIV, y su muralla se caracteriza por tres imponentes torres cilíndricas de defensa que han soportado la prueba del tiempo. El Castillo de Tossa de Mar es una joya histórica que nos conecta con un pasado de aventuras marítimas y leyendas.
Castillo de Trujillo (Cáceres)
El Castillo de Trujillo atesora la riqueza de la arquitectura andalusí de la era Omeya, con sus raíces que se remontan a los siglos IX y X. El imponente patio de armas, rodeado por sólidas torres defensivas, se extiende a lo largo de más de 40 metros, creando una visión espectacular. La fortaleza, visible desde lejos, despierta la imaginación y transporta a los visitantes a un pasado de esplendor. Recorrer las murallas y disfrutar de las vistas panorámicas es una experiencia inolvidable. El Castillo de Trujillo es un testimonio viviente de la historia que cautiva a todos los que lo exploran.
Alcázar de Segovia
El Alcázar de Segovia es una maravilla arquitectónica que se alza de forma majestuosa en la ciudad de Segovia. Su apariencia de cuento de hadas, con torres puntiagudas y una ubicación estratégica sobre un afloramiento rocoso, lo convierte en uno de los castillos más emblemáticos del país. La historia del Alcázar se remonta al siglo XII, y ha servido como residencia real, prisión e incluso fuente de inspiración para el famoso castillo de Disney. Su interior alberga tesoros artísticos, como la Sala de las Piñas y la Sala del Trono. El Alcázar de Segovia es un testimonio impresionante de la historia y la arquitectura medieval de España.
Castillo de Ampudia (Palencia)
El Castillo de Ampudia evoca el encanto de la Edad Media. Construido en el siglo XV, este castillo se alza con imponencia sobre el pintoresco pueblo de Ampudia. Su arquitectura presenta elementos góticos y renacentistas, con torres almenadas y un patio interior. Durante su historia, ha desempeñado papeles como residencia noble y fortaleza defensiva. En la actualidad, el Castillo de Ampudia alberga un museo que exhibe una impresionante colección de arte y objetos históricos, permitiendo a los visitantes explorar tanto la arquitectura medieval como la rica herencia cultural de la región de Palencia.
Castillo de Belmonte (Cuenca)
El Castillo de Belmonte, con sus raíces que se remontan a 1456, es una joya histórica que ha sido testigo de innumerables episodios significativos a lo largo de los siglos. Su imponente presencia, enclavada en medio de vastas llanuras, oculta su sorprendente interior de estilo francés. Inicialmente construido en la época medieval, experimentó una transformación completa en el siglo XIX bajo la dirección de la emperatriz Eugenia de Montijo, de Francia. Hoy, este castillo es un escenario vivo de la historia, con visitas teatralizadas que transportan a los visitantes a tiempos pasados y entrenamientos de combates medievales que mantienen viva su esencia histórica.
Castillo de Berlanga de Duero (Soria)
El castillo de Berlanga de Duero es una impresionante fortaleza situada en lo alto de un cerro, que domina la villa medieval del mismo nombre. Fue construido entre los siglos XV y XVI, combinando elementos defensivos y residenciales. Tiene dos recintos amurallados, uno de época medieval y otro de época renacentista, adaptado al uso de la artillería. En su interior se pueden ver restos de torres, aljibes, salas y capillas. Un precioso lugar para conocer la historia de esta comarca soriana que merece una visita.
Castillo de La Calahorra (Granada)
El Castillo de La Calahorra, en Granada, es un ejemplo excepcional del renacimiento italiano, erigido en 1509 y notablemente bien preservado. En su interior, los sótanos guardan la historia de presos moriscos que aguardaban su destino en las celdas mientras eran trasladados a la Cancillería granadina. Para explorar este tesoro arquitectónico y conocer su fascinante pasado, es necesario concertar la visita con antelación. El Castillo de La Calahorra no solo es un monumento impresionante, sino también un testimonio de los momentos cruciales de la historia de Granada, que espera ser descubierto por aquellos que deseen sumergirse en su legado.
Castillo de la Mota (Valladolid)
El Castillo de la Mota es una fortaleza medieval que se yergue en una colina con vistas panorámicas de la ciudad vallisoletana de Medina del Campo y sus alrededores. Su historia se remonta al siglo XI, y ha desempeñado un papel clave en numerosos acontecimientos históricos, incluyendo el reinado de los Reyes Católicos. La estructura se caracteriza por sus robustos muros, torres de vigilancia y un profundo foso. Hoy en día, el Castillo de la Mota es un museo que permite a los visitantes explorar su pasado glorioso, así como disfrutar de la impresionante arquitectura y las vistas panorámicas que ofrece.
Castillo Real de Olite (Navarra)
El Castillo Real de Olite, construido entre 1387 y 1425, es un intrincado conjunto de torres, estancias, galerías y patios que forman una silueta inconfundible, dominando la ciudad desde cualquier ángulo. Su estructura aparentemente caótica revela la rica historia de los reyes y señores que lo ocuparon, y ofrece una ventana al pasado del Reino de Navarra. Explorar sus pasillos y jardines es como embarcarse en un viaje en el tiempo, descubriendo los secretos y las intrigas que se desarrollaron entre sus muros a lo largo de los siglos. El Castillo Real de Olite es un tesoro histórico que cautiva a los amantes de la historia y la arquitectura.
Castillo de Vélez-Blanco (Almería)
El Castillo de Vélez-Blanco es un testimonio arquitectónico del Renacimiento español. Esta fortaleza fue construida en el siglo XVI por la familia Fajardo, en un esfuerzo por demostrar su poder y prestigio en la región. El castillo se destaca por su elegante fachada renacentista y su impresionante patio interior, adornado con espléndidos relieves de mármol blanco. A lo largo de los años, ha sido restaurado y conservado para mantener su belleza histórica. El Castillo de Vélez-Blanco es un símbolo del esplendor renacentista en España y una atracción cultural que transporta a los visitantes a una época de opulencia artística y arquitectónica.