Los dos activistas climáticos que perpetraron una acción de protesta en un museo de La Haya contra el cuadro ‘La joven de la perla’, llegando incluso uno de ellos a pegarse la cabeza con pegamento a la famosa obra de Johannes Vermeer, han sido condenados a dos meses de prisión.
Un juez de un tribunal de La Haya ha considerado probada la intención de destrucción contra el cuadro, que no sufrió daños, y ha calificado de «impactante» la acción de protesta. «Es posible que tratara de causar el menor daño posible, pero por la forma en que actuó aceptó la posibilidad de que la pintura pudiera dañarse», ha dicho, según ha recogido la empresa de radiodifusión NOS.
La pena ha sido inferior a la exigida anteriormente por la Fiscalía, que pedía cuatro meses de prisión, dos de ellos condicionales, contra los responsables. El tercero de los involucrados no ha comparecido ante los tribunales por no estar de acuerdo con el juicio rápido, pero será juzgado en el futuro.
La Policía neerlandesa detuvo a tres activistas por esta acción: uno de ellos por pegarse la cabeza contra el cuadro, el otro por arrojar un líquido rojo sobre la pintura, protegida por un vidrio, y el tercero por grabar supuestamente la acción de protesta.
Tras el suceso, el museo Mauritshuis lamentó la «indefensión» del arte y condenó cualquier intento por dañar las obras, independientemente de sus objetivos. En las últimas semanas, se han sucedido las protestas en museos de todo el mundo, con incidentes en Alemania, Reino Unido y Francia.