El Gobierno de Alemania ha pedido al Gobierno de Italia que auxilie «rápidamente» a los más de cien menores no acompañados que están a bordo del barco de la ONG SOS Humanity, que espera una autorización para llevar a puerto a 179 migrantes y refugiados rescatados en el Mediterráneo.
El ‘Humanity 1’, con bandera alemana, está a expensas de lo que decidan las autoridades italianas, al igual que el ‘Geo Barents’ de Médicos Sin Fronteras (MSF) y el ‘Ocean Viking’ de SOS Mediterranée. En total, casi un millar de migrantes permanecen por tanto a la espera.
El Gobierno italiano, que endurecerá su política migratoria tras el ascenso de la ultraderecha, ha reclamado a los países de origen de estas embarcaciones que se hagan cargo de los migrantes y refugiados. El Ejecutivo alemán respondió alertando de las necesidades inmediatas de los pasajeros del ‘Humanity 1’, muchos de los cuales requieren asistencia médica.
«Salvar a personas en peligro de muerte es lo más importante», reza esta respuesta, en la que se defiende también la «contribución importante» que realizan las ONG, a las que Roma acusa en cambio de alentar la inmigración irregular en el norte de África, según la cadena Rai.
El Ministerio de Exteriores italiano ha respondido en otra nota a la Embajada alemana para adelantar que examinará al detalla la situación en el barco y, a continuación, tomará una decisión.
El ministro del Interior, Matteo Piantedosi, de la Liga, defendió esta semana esta nueva doctrina. «No podemos traer migrantes que son rescatados en el mar por barcos extranjeros que operan sin ningún tipo de coordinación con las autoridades», aseveró, según el diario ‘Corriere della Sera’.
Piantedosi alegó que los migrantes que llegan al país tras ser rescatados por estos buques suponen el 16 por ciento de las llegadas. «Italia no abandonará su deber de rescatar a la gente en el mar, pero la solidaridad europea se tienen que convertir en una realidad», exhortó.