El Departamento de Estado de Estados Unidos ha calificado de «inaceptable» la injerencia de varios diputados de El Salvador en las elecciones de mitad de mandato celebradas a principios de mes, después de que algunos de estos hayan pedido votar en contra de algunos congresistas de origen centroamericano.
Es el caso de la representante demócrata Norma Torres, nacida en Guatemala, y blanco de las críticas de, entre otros, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien ya el año pasado pidió a través de Twitter a la comunidad latina de Estados Unidos que no votaran por ella. «No trabaja para ustedes, sino para mantener a nuestros países en el subdesarrollo», escribió.
En esa línea se manifestó en vísperas de las elecciones Christian Guevara, diputado del partido de Bukele, Nueva Ideas, quien en la misma red social pidió a la diáspora latina no votar por Norma Torres por el supuesto «daño» que habría ocasionado a El Salvador.
Torres ha protestado por la campaña en su contra que los miembros del Gobierno de Buekele han estado realizando con especial fruición en redes sociales, pidiendo el voto para sus rivales republicanos. Como consecuencia de ello, ha denunciado haber sido acosada en persona y a través de mensajes redes.
En el mensaje celebrando su reelección para en la Cámara de Representantes por el distrito 35 de California, Torres criticó a su rival republicano por aceptar «el escandaloso respaldo» de Bukele, a quien acusó de violar los Derechos Humanos y promover el odio, el racismo y la división contra los comunidades indígenas.
A su vez, mostró su «decepción» con el sistema judicial estadounidense por no haber abordado la injerencia extranjera en aquellas elecciones. «Muchos de los ataques en redes fueron orquestados en El Salvador por el presidente Nayib Bukele (…) Este tipo de flagrante manipulación de nuestra política electoral exige una fuerte respuesta del Gobierno Federal», reclamó.
En respuesta, el Departamento de Estado ha confirmado a la NBC que tiene constancia de estos «alarmantes» intentos por parte de «algunos salvadoreños» de influir de manera directa en las últimas elecciones.
«Como hemos dejado en claro en repetidas ocasiones, esto es inaceptable, y lo hemos comunicado en repetidas ocasiones directamente al Gobierno de El Salvador a través de los canales diplomáticos oficiales. La integridad de nuestras elecciones es parte vital de nuestros procesos democráticos; la voluntad del pueblo no debe ser socavada por la injerencia extranjera», señala el Departamento de Estado.
Torres revalidó su escaño en la Cámara por el distrito 35 de California –de gran mayoría hispana– en las elecciones del 8 de noviembre con el 57,4 por ciento de los votos frente al republicano Mike Cargile, con el 42,6 por ciento de los apoyos, quien logró una de las mejores actuaciones de su partido en ese área.