El Ministerio de Salud de Portugal ha anunciado que todos los pasajeros provenientes de China deberán presentar una prueba negativa de COVID-19 al momento del embarque, uniéndose así a otros países de Europa que ya han decidido reforzar el control fronterizo con el país asiático.
La medida entrará en vigor a las 00.00 horas del domingo y, a partir de la madrugada de este sábado, los pasajeros que lleguen a Portugal en esta ruta «estarán sujetos a pruebas aleatorias, pero obligatorias», según ha recogido el diario ‘Público’.
La cartera de Salud también ha precisado que la prueba aleatoria se aplicará «a los pasajeros del vuelo procedente de China y que aterriza este sábado» en Lisboa. Paralelamente, también se pondrán en práctica mecanismos de monitorización de aguas residuales en el Aeropuerto Internacional Humberto Delgado, en Lisboa y en aviones procedentes de China, con vistas a la identificación del virus SARS-CoV-2 y posterior secuenciación genómica.
El Gobierno portugués ha estado considerado la introducción de esta medida durante varios días, todo ello mientras otros Estados miembros de la Unión Europea como España, Italia o Francia ya han anunciado restricciones a los viajeros procedentes de China.
La explosión de casos de COVID-19 en China, derivada de la retirada de la mayor parte de las restricciones impuestas durante toda la pandemia, ha generado preocupación a nivel mundial, llevando a países en todo el mundo a imponer nuevos controles para los viajeros procedentes del gigante asiático.
Fuente: (EUROPA PRESS)