El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha sancionado este sábado el Acuerdo de Escazú que tiene por objetivo la protección del medioambiente y fomentar la participación ciudadana en esta materia, antes de dirigirse a Egipto para asistir a la COP27.
Este texto busca garantizar el acceso a la información y a la justicia ambiental, por lo que incluye una estrategia de «acompañamiento» a los defensores ambientales, que incluye a los pueblos étnicos de la nación, según recoge la emisora colombiana Caracol.
«Esta es una ley vital para la ciudadanía de Colombia y lo hemos hecho en un trabajo conjunto entre el Congreso, el Gobierno y la ciudadanía. El cambio político trajo un cambio que no se había podido hacer en tres años y es la ratificación del Acuerdo de Escazú», ha destacado la ministra de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Este texto fue firmado en 2019 por el gobierno de Iván Duque, pero que no había sido ratificado por el pasado Congreso, por lo que este ha supuesto su último paso para su entrada en vigor.
Escazú es un tratado desarrollado pro 24 países de América Latina y el Caribe para mejorar «el acceso a la información, la participación pública y el acceso a la Justicia en asuntos ambientales» en la región, según dicta el acuerdo.