La Quinta Flota de la Marina de Estados Unidos ha anunciado la intercepción de más de 50 toneladas de municiones ocultas en un pesquero que cubría una ruta con destino a Yemen.
La operación tuvo lugar el pasado 1 de diciembre y fue desarrollada por la tripulación del buque de base móvil expedicionario ‘USS Lewis B. Puller’ durante una maniobra de verificación.
El cargamento comprendía más de un millón de cartuchos de calibre 7.62mm; 25.000 cartuchos de 12.7mm; unas 7.000 espoletas para cohetes y 2.100 de combustible para granadas autopropulsadas.
El comandante del Mando Naval Central, vicealmirante Brad Cooper, ha denunciado que el cargamento procedía de Irán con destino a la insurgencia huthi de Yemen, respaldada por la república islámica en su guerra contra el Gobierno yemení.
«Esta importante incautación demuestra claramente que continúa la transferencia ilegal de ayuda letal y el comportamiento desestabilizador de Irán», ha declarado Cooper en el comunicado de la Marina, publicado el sábado.
Los huthis no se han pronunciado sobre esta operación más allá de condenar «el comportamiento de América en el mar Rojo», cuyas prácticas «ponen en peligro la paz y la seguridad internacionales», según un comunicado del Ministerio de Exteriores huthi recogido por el portal South24.