El presidente de Bulgaria, Rumen Radev, ha entregado este lunes al partido Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB) el mandato para formar el nuevo Gobierno, tras cerca de dos meses de consultas después de que las legislativas de octubre se saldaran sin una clara mayoría.
El líder del GERB, el ex primer ministro Boiko Borisov, afirmó el domingo que, tras recibir el mandato, se abren dos opciones: volver a ser primer ministro o proponer a una persona ‘neutral’ que proponga un ‘acuerdo marco’ que sea aceptado por todos los partidos, según ha recogido el diario ‘Dnevnik’.
El partido contará con siete días para intentar lograr los apoyos necesarios entre el resto de formaciones para que el Gobierno que ensamble reciba el respaldo del Parlamento, si bien hasta ahora Borisov no ha logrado garantizarse una mayoría de escaños que apoyen su proyecto.
De hecho, el propio Radev avanzó el 21 de noviembre que se verá forzado a convocar elecciones anticipadas para marzo en caso de que fracasen todos los intentos de formar gobierno, aunque reconoció que unos nuevos comicios podrían contar con una baja participación.
El presidente reprochó al Parlamento búlgaro no haber alcanzado acuerdos en cuestiones, como el plan de recuperación y sostenibilidad y otras leyes importantes. «Esto no es lo que los ciudadanos esperan», dijo, antes de argumentar que «no hay partidos pequeños ni grandes (…) porque la responsabilidad es común».
En las elecciones, celebradas el 2 de octubre, el GERB se impuso con más del 25 por ciento de los votos, por delante de la formación del actual primer ministro, Kiril Petkov, Seguimos por el Cambio, que recabó el 20,2 por ciento de los apoyos.
Las elecciones fueron convocadas tras una moción de confianza perdida en junio por la coalición encabezada por Petkov después de la retirada de uno de sus socios del Gobierno, lo que llevó al primer ministro, quien llevaba medio año en el cargo, a convocar elecciones anticipadas, las cuartas en un año y medio.