El Ejército chino ha comenzado a efectuar este domingo ejercicios de ’’ataques de precisión’’ sobre ’’objetivos clave’’ en Taiwán, en el segundo día del simulacro de bloqueo a gran escala que está efectuando alrededor de la isla.
’’El Mando Oriental de Operaciones del Ejército Popular de Liberación (el Ejército chino) continúa con los simulacros alrededor de la isla de Taiwán, realizando ataques de precisión simulados en objetivos clave en la isla y las aguas circundantes’’, según el comunicado militar recogido por ’China Daily’.
Durante los simulacros, múltiples destructores y fragatas de la Marina del Ejército chino ’’se han acercado rápidamente a la isla de Taiwán, tomaron posiciones ventajosas y practicaron asaltos de cerca, disuasión de largo alcance y defensa aérea’’, añade por su parte la televisión estatal china CCTV.
Esta pasada madrugada, el Ministerio de Defensa de Taiwán ha detectado que al menos 71 aviones de combate y nueve barcos de guerra chinos se han aproximado al territorio, y alertado de que 45 de los aviones atravesaron temporalmente la ’’línea Davis’’ que divide el estrecho y marca el comienzo de su zona de seguridad; un número extremadamente alto incluso para las incursiones habituales que China lleva realizando durante los últimos meses.
Este simulacro a gran escala ha sido entendido como una respuesta al encuentro protagonizado esta semana por la presidenta Tsai Ing Wen con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, en lo que Pekín consideró como una afrenta a sus reclamaciones soberanistas sobre el territorio.
Esta pasada madrugada, el Consejo de Taiwán para Asuntos Continentales (MAC, por sus siglas en inglés) ha condenado el comienzo de los ejercicios y asegurado que no cederá ante las amenazas.
En un comunicado recogido por el ’Taipei Times’, el organismo taiwanés recuerda que la presidenta ’’viaja habitualmente a EEUU y mantiene conversaciones cara a cara con los líderes de gobiernos amigos para facilitar la paz a través del Estrecho de Taiwán.
’’China debe aprender a lidiar con este tipo de interacciones normales y practicar el autocontrol, lo que podría ayudar a evitar errores de cálculo o dañar aún más su relación con Taipei’’, añade la nota.
’’Ningún comportamiento amenazador de China puede cambiar el hecho’’, remacha el Consejo, ’’de que los dos lados del Estrecho no están subordinados entre sí, ni va a afectar la determinación de los taiwaneses de mantenerlo así’’.
Fuente: (EUROPA PRESS)