El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha señalado este lunes que ve «muy preocupantes» las noticias sobre el supuesto soborno de Qatar a la vicepresidenta del Parlamento Europeo Eva Kaili en el marco de una trama corrupta para promover los intereses del país del Golfo en la política europea, aunque ha señalado que hay que respetar el proceso judicial en marcha.
En declaraciones previas a la reunión de ministros de Exteriores de la UE, Borrell ha afirmado que las acusaciones contra Kaili son «muy graves» y que le preocupan como antiguo presidente de la Eurocámara, para, a renglón seguido, defender que el Servicio de Acción Exterior que dirige no se ha visto salpicado por la trama, así como tampoco las embajadas de la UE en el exterior. «No estamos afectados», ha señalado.
«No soy un juez y hay un proceso en marcha, pero las noticias son muy muy preocupantes», ha resumido tras salir a la luz la trama de presuntos sobornos por parte de Qatar a personas que pudieran influir en la toma de decisiones de la Eurocámara y que se ha saldado con seis detenidos, entre ellos Kaili y el antiguo eurodiputado socialista Pier-Antonio Panzeri.
Durante los registros, las autoridades se han incautado de unos 600.000 euros en efectivo y material informático y teléfonos móviles para su análisis por parte de los investigadores.
El Parlamento Europeo anunció este sábado la suspensión a la socialista griega de todas sus competencias y poderes como vicepresidenta de la Eurocámara, aunque no del cargo en sí mismo, dadas las «investigaciones en curso que están realizando las autoridades belgas».
La decisión es de la propia presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, quien «ha decidido suspender con efecto inmediato todos los poderes, tareas y competencias delegadas en Eva Kaili como vicepresidenta» de la cámara, ha informado la portavocía del Parlamento Europeo.
El último eurodiputado salpicado por el caso es el socialista belga Marc Tarabella, cuyo domicilio fue registrado por la Policía belga en el marco de la investigación sobre presuntos sobornos, aunque no ha sido privado de libertad. En declaraciones al periódico ‘Le Soir’ se ha defendido de las acusaciones y ha aseverado que «nunca» ha recibido un regalo de Qatar.